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Tigres no levanta cabeza y seguro le revuelve el estómago a sus aficionados. Hace unos días, el equipo felino se anotó con el primer fracaso de la era de Miguel Herrera, luego de ser eliminado de las Leagues Cup por el Seattle Sounders, y ahora no pasó del empate en su visita al Puebla, en la Jornada 4 de la Liga MX.
El equipo no juega bien y parece que comienza a haber fricciones dentro del vestuario, al punto que ya circulan rumores de que hay jugadores que intentarían tenderle la cama al entrenador. El Piojo, por cierto, no ayuda a la armonía, culpando de los malos resultados a que los jugadores todavía no pueden sacarse de encima el sistema y las prácticas de la era Ferretti y hasta ventilando problemas que quizás los futbolistas preferirían mantener en privado.
La diarrea de Leo Fernández
Esto último quedó de manifiesto después del partido ante Puebla, cuando Herrera, tratando de explicar el rendimiento del equipo, ventiló los problemas que afectaron al mediocampista Leo Fernández.
“El único que no tuvo la intensidad que nosotros pensamos fue Leo Fernández, desafortunadamente tuvo un evento en la noche, anduvo con una diarrea y sabía que podía dar menos, dijo que sí estaba para jugar, llegó mermado, es culpa mía”, señaló.
De verdad, está grabado:
“El único que no tuvo la intensidad que nosotros pensamos fue Leo Fernández, desafortunadamente tuvo un evento en la noche, anduvo con una diarrea y sabía que podía dar menos, dijo que sí estaba para jugar, llegó mermado, es culpa mía”. pic.twitter.com/92tzjqAq1F
— PressPort (@PressPortmx) August 14, 2021
No costaba nada decir “algunos problemas físicos” o incluso “problemas estomacales”.
Y no es que tenga algún problema con la palabra “diarrea”, pero hay personas que sí lo tienen y deja expuesto al jugador. Cero tino, cero tacto.
Resumen Puebla vs Tigres
Por cierto, lanzar lo de la diarrea como efecto cortina no alcanza a esconder todos los problemas que tiene Tigres.
Defensivamente, el equipo dio varias licencias al Puebla, equipo que siempre estuvo más cerca de anotar. Pese a eso, Tigres se las arregló para causar peligro, pero solo para demostrar que arriba también está sufriendo.
Lo que se perdió Nicolás López a los 23 minutos es para golpearse la cabeza en la pared.
Por supuesto, no haber aprovechado esa oportunidad tuvo un castigo como consecuencia.
Al cierre del primer tiempo, Fernando Aristeguieta convirtió desde el punto penal, luego de que Carioca derribara a Christian Tabó dentro del área.
En el complemento, Nahuel Guzmán se lució para mantener la diferencia corta y eso motivó a Tigres. El equipo norteño comenzó a arrimarse a la portería de Puebla y a los 56’ López pagaría sus pecados, anotando el 1-1.
Tras el empate, el juego se desordenó un poco. Chances hubo para ambos, pero los sueños de Tigres acabarían en el minuto 83, cuando Luis “Chaka” Rodríguez recibió la roja al detener un contragolpe de Javier Salas.
La del Chaka fue la tercera roja del equipo en cuatro jornadas, añadiendo otra preocupación a la convulsa era de Herrera en Tigres.
El martes 17 de agosto, Tigres tendrá una nueva oportunidad de enmendar el rumbo cuando enfrente al Querétaro en el Estadio El Volcán.
