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América Y Chivas Empatan En Un Clásico Con Zapes, Piquetes De Ojos Y Un VAR Inoperante

El Clásico Nacional entre América y Chivas pudo haber terminado con un mezquino 0-0, pero ninguno de los 60.000 espectadores que acudieron al Azteca ni los millones que lo vieron por TV podrán decir que fue un partido aburrido. Hubo oportunidades para ambos equipos y una larga lista de polémicas alimentadas por el mal arbitraje de César Arturo Ramos y un VAR que miró para el lado en un par de jugadas que merecían tarjetas rojas.

América ofreció lo suyo en la era de Santiago Solari. Un juego que muchas veces no parece muy vistoso, que a veces induce al sueño, pero que crea chances y la mayoría del tiempo consigue victorias. Ante el Rebaño, sin embargo, no pudo ante el arquero Raúl Gudiño.

Varios lo intentaron, pero al final el portero siempre le cerró a Las Águilas los caminos a la alegría.

Por otro lado, Chivas llegaba al partido con el proceso de Víctor Vucetich en el espejo retrovisor y Michel Leaño como técnico interino. Fuera lo que fuera, el cambio de mano o de aire generó un impacto positivo en el equipo. Este quedó de manifiesto en la actitud de los jugadores, mucho más agresivos y con más ganas de defender los colores que llevan.

El regreso de Alexis Vega, quien sufrió una lesión de tobillo con la selección, también ayudó. El extremo, de hecho, complicó constantemente a la zaga azulcrema con su velocidad, pero tampoco fue capaz de doblegar la resistencia del cuidapostes rival, Guillermo Ochoa, ni de afinar la puntería.

Arbitraje y VAR en América vs Chivas

Otra vez, no fue un mal partido. No obstante, el rendimiento de ambos equipos quedó opacado por la performance del silbante César Ramos y la poca ayuda que recibió del VAR.

El sistema de videoarbitraje debió por ejemplo intervenir en una entrada de Cristian Calderón sobre Jorge Sánchez. Porque por mucho que Chicote haya ido por el balón, sus tachones fueron más arriba de lo permitido, dejando una huella visible en la pierna de Sánchez.

En Liga MX se han visto expulsiones por menos y la decisión de ni siquiera ir a revisar la jugada es simplemente incomprensible. Y lamentablemente sería la tónica del partido.

Minuto después, sería el mismo Sánchez quien se salvaría de la expulsión. Luego de un foul sobre su compañero, Pedro Aquino, el lateral aprovechó el tumulto para lanzar un zape sobre el mediocampista Sergio Flores. Varios jugadores de Chivas vieron el golpe y fueron a encararlo, pero al final su acto quedó impune.

Es cierto, fue un toquecito, pero el reglamento es claro en torno a agresiones o actos que inciten a la violencia.

El tercer acto y final tuvo como responsable a Miguel Ponce, quien en un entrevero con Henry Martin, terminó metiendo uno de sus dedos en el ojo izquierdo del delantero americanista.

Pese a que Ramos estaba frente a la acción y la existencia de cámaras, nadie dijo nada y Ponce siguió en el campo de juego.

En redes sociales, por cierto, la gente se daba un paseo con la jugada, con memes sobre el piquete mismo, pero también criticando a TUDN México (parte de Televisa, dueña del América) por reírse del zape que pegó Sánchez, pero casi pidiendo la hoguera para Ponce.

Resumen América vs Chivas

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